
11 Jul Perspectivas del soft-signage en 2022
Hace unos años, el soft signage, popularmente conocido como rotulación suave o comunicación gráfica sobre textil, parecía ser una tendencia segura y en auge.
Lo cierto es que finalmente se ha impuesto de manera silenciosa y mucho más rápido de lo que pensábamos. Pero para la mayoría de los consumidores finales sigue sin tener nombre.
Este hecho, que posiblemente es ajeno a muchos profesionales del sector, representa probablemente una amenaza. Sobre todo cuando el Digital Signage como herramienta de comunicación visual se está popularizando…
Y lo que es aún más intimidante, en el sector del retail, una de las principales áreas donde el soft-signage ha tenido históricamente un potencial de crecimiento importante, las grandes marcas ya están familiarizadas con esta alternativa y la perciben como un inmenso terreno de posibilidades.
El digital signage, ¿es realmente una amenaza para el soft-signage?

El Digital Signage permite el uso de contenidos dinámicos y audiovisuales. Esto, por sí mismo, le convierte en una herramienta atractiva cuando lo que se busca es dinamizar las ventas y más aún cuando hablamos de un público objetivo muy joven.
Por otro lado, permite también el uso de contenidos personalizados que se adaptan en tiempo real. Con la consolidación de aquellas tecnologías que han permitido la digitalización del marketing de proximidad y el marketing por geolocalización como Beacons, Bluetooth, NFC, RFID y GPS, atraer a potenciales clientes que se encuentran en las inmediaciones de una tienda o incrementar el ticket medio optimizando la experiencia de compra del cliente es mucho más fácil y tremendamente económico y rentable.
Además, las posibilidades la integración entre tecnologías de comunicación y Digital Signage Displays permite poner al usuario en el centro de la experiencia. Y lo hace de una forma que nunca antes habría sido posible. Con una repercusión más que notable sobre el ratio de conversiones, el ticket medio y el posicionamiento de marca.
Esta fórmula de captar clientes y potenciales clientes y de enfocar la relación con la marca permite también ahondar en la recopilación de datos de los consumidores. Conseguir información detallada sobre estos, hasta hace poco era una tarea complicada para los retailes de todos los sectores, incluido moda. Con la introducción del mundo e-commerce se hizo posibl. Y con el proceso de integración de tecnologías en el punto de venta, el registro de datos de calidad será una realidad tangible.
De hecho, ya hay numerosos casos de éxito sobre la implementación del Marketing Tech en el punto de venta. Aquí os dejamos un ejemplo que explica muy bien cómo se desarrollará el punto de venta en los próximos años y cómo se integran todas estas tecnologías.
¿Y el mundo e-commerce?
Con la pandemia mundial provocada por el COVID-19, procesos que ya estaban en curso se han acelerado. Debido a las medidas de distanciamiento, aforo, confinamiento y toques de queda que todos los países del mundo se han visto obligados a implementar, y a las consecuencias en movilidad que han supuesto, muchos retailers han tenido que tomar la decisión de cerrar tiendas, puntos de venta y realizar ajustes de plantilla. Sin embargo, estos cierres no han tenido un impacto negativo en las ventas. Por eso, muchas marcas han seguido ahondando en su reestructuración y en un mayor grado de digitalización.
En estos momentos, a pesar de la relajación de las medidas y a la progresiva recuperación del tráfico exterior, no se han alcanzado los niveles pre-pandémicos en términos de tráfico a los puntos de venta. Y aún cuando se alcanzasen, ¿esto implicaría, de forma proporcional, una vuelta a las cifras de visitantes en los establecimientos y las correspondientes tasas de conversión? Posiblemente no.
El 2020 fue el gran año para las ventas e-commerce y muchas empresas aprovecharon el momento para acelerar sus procesos de digitalización. Sin embargo, la tendencia crece de forma exponencial. Durante 2021, el mundo e-commerce ha experimentado un crecimiento a nivel global del 58% durante el primer trimestre del año (41 puntos porcentuales sobre las cifras de crecimiento registradas en el mismo periodo en 2020).
Entonces, ¿cómo se transformará el mundo del retail en los próximos años?
Digitalización, internacionalización y el cliente como el centro absoluto de la estrategia en todas las fases del embudo de ventas. Estos serán, con casi total seguridad, los tres pilares que sostendrán el mundo del retail en el corto y medio plazo.
Por supuesto, la digitalización conllevará al cierre – como comentábamos- de numerosos puntos de venta físicos de grandes marcas. Sin embargo, se impulsarán aquellos espacios que dispongan de un emplazamiento clave a nivel de branding, creando flagships únicos y completamente experienciales.
Y aquí hay una gran oportunidad…
Estos espacios serán la herramienta perfecta para posicionar la marca y dotarla de una identidad lo suficientemente potente para generar un alto nivel de engagement con los clientes. Además, servirán también de base para alcanzar la omnicalidad.
Omnicalidad: estrategia de las marcas para lograr su presencia en los diferentes canales de comunicación de forma integrada, facilitando una experiencia de cliente off y on fluida y sin fisuras, tanto en el customer journey como en la experiencia de marca.
Para conseguir estos objetivos y generar el tráfico necesario de visitantes, las marcas buscarán la renovación continua de estos espacios. Así como la implementación de actividades, que transformen la experiencia de compra aún más en una experiencia de ocio. Y aquí tanto el digital signage como el soft-signage tendrán su espacio.
Además, aquellas vías comerciales de las grandes ciudades que eran copadas por las principales marcas del retail moda, se convertirán en el futuro en una especie de recorrido temático.
Nuevos players
En estas «millas de oro» proliferará la presencia de aquellas marcas que, hasta hace poco, no contaban con un espacio físico propio. A través de estos espacios, marcas de todos los sectores B2C por fin podrán interactuar con el consumidor. En el pasado solo podían mantener una comunicación casi unidireccional con sus clientes y potenciales clientes hasta la aparición de las redes sociales. Desde entonces, la comunicación se ha converido en bidereccional y, a través de diversas acciones de maketing, la interacción marca-cliente se ha visto multiplicada. Con la presencia física en un punto de encuentro, no solo del producto, sino de todos los territorios en los que la marca se mueve, se hace realidad la «fisicalización» de la marca.
¿Quieres ver un buen ejemplo de cómo el punto de venta de las grandes marcas se transformará en los próximos años? Entonces, no dejes de visualizar este vídeo, realmente es un ejemplo muy ilustrativo y regional de lo que ya está llegando.
Entonces, ¿cuál es el espacio del soft-signage para los próximos años? Diferenciación, diferenciación y diferenciación.
El soft-signage seguirá teniendo su espacio en ferias y eventos y también lo hará, desde luego, en el punto de venta. Además, se consolidan nichos de mucho interés para los productores de aplicaciones soft-signage. Nos referimos aquí a los eventos culturales y su aplicación en museos. Pero es en el sector del retail donde su aplicación sufrirá un cambio más profundo.
Las tiradas se verán aún más acortadas. Posiblemente se generará una mayor rotación de producto y, en consecuencia, de stock. Las grandes marcas buscarán la diferenciación, como siempre. El objetivo de las aplicaciones del soft signage en el punto de venta será el de contribuir a crear espacios exclusivos. Sus principales aliados serán aquellos profesionales orientados a la decoración de espacios comerciales de interior, los escaparatistas y los profesionales del marketing.
Sin duda, el soft-signage tiene dos ventajas competitivas claras y una propuesta de valor única frente al digital signage: puede jugar un papel fundamental en espacios premium y permitir «cambios de escenario» completos de forma fácil y rápida.
Estos espacios premium suelen estar dirigidos a un público que se siente atraído por la exclusividad, la elegancia y que busca en la experiencia de compra una atención personalizada, el trato humano y un momento de hedonismo y desconexión. Las aplicaciones soft-signage pueden ser una herramienta de comunicación visual que contribuyan a crear el entorno perfecto. Gracias a su ligereza y dinamismo consigue comunicar de forma eficaz, evitando la estridencia que pueden suponer los displays digitales en entornos que buscan transmitir sosiego y excelencia. Además, gracias al soft-signage, el mismo punto de venta puede dar un giro de 360º en tan solo unas horas, de forma fácil y rápida. Esto también puede ser un importante atractivo para las grandes marcas, que buscarán una renovación continua de sus espacios.
Conclusiones
Posiblemente el soft-signage será una de las aplicaciones, en el contexto de la comunicación visual de gran formato, que mejor se adapte a la transformación que acarrearán los cambios en los hábitos de consumo y la exponencial integración de las nuevas tecnologías.
2022, año clave
2022 será un año clave para afrontar nuevos retos y las grandes marcas lo aprovecharán para consolidar sus procesos de digitalización.
Por eso, el sector de la producción gráfica está agilizando, de forma paralela, procesos que también se habían iniciado recientemente. Sin embargo, tendrá que pisar el acelerador para poder dar una respuesta eficiente a los nuevos requerimientos de sus clientes.
Sin duda, aquellas empresas que se orienten a la diferenciación, optimizarán -como suele ser habitual- sus posibilidades.
En este sentido, entra en juego la capacidad de las empresas del sector gráfico para ofrecer nuevos servicios.
En busca de la diferenciación y de la simplificación de procesos
Por otro lado, las aplicaciones requerirán de la mejor calidad, la mejor gama cromática y consistencia, pues habrá una tendencia a la utilización del soft-signage no solo como herramienta de comunicación, sino como herramienta de decoración.
Por supuesto, la minimización de la huella ecológica de los procesos y la seguridad de las aplicaciones será un must. Los productores requerirán máquinas fiables, que permitan simplificar y agilizar los procesos. Y, por supuesto, que ofrezcan la mejor calidad para ofrecer una respuesta eficaz a las necesidade del sector.